Por: Juan Vázquez
Grupos independientes de senderismo recabaron víveres para beneficiar a las personas damnificadas que dejaron los incendios forestales, registrados la semana pasada, en la región de las Altas Montañas de Orizaba, Veracruz.
De acuerdo con autoridades locales, la emergencia arrasó, durante varios días, con alrededor de 650 hectáreas.
Por ejemplo, hubo 160 productores que perdieron sus cosechas y 200 familias se quedarán sin trabajo, ya que se quemó una fábrica de cartón donde laboraban.
Por esa razón, en el parque Castillo, corazón de este Pueblo Mágico, integrantes del grupo «Senderos libres*, organizaron una jornada ciudadana de ayuda.
En este ejercicio, la ciudadanía de Orizaba realizó el acopio de víveres entre agua embotellada, enlatados, comida, enseres domésticos, ropa y algunos medicamentos, principalmente.
Los grupos voluntarios advirtieron una crisis hídrica y económica como consecuencia de que los incendios no solo provocaron la pérdida de la superficie forestal; las llamas también devoraron viviendas, cosechas y hasta una empresa.
De acuerdo con un recorrido que realizó este medio de información, las comunidades más afectadas fueron Palo Verde, Chicahuaxtla, El Nicho del municipio de Nogales y Ciudad Mendoza.
A raíz de los siniestros, organismos empresariales y de la sociedad civil organizada llamaron a las autoridades de los tres órdenes de gobierno, federal, estatal y municipal, a colaborar para mitigar los efectos de la contingencia ambiental y acelerar la reconstrucción de las comunidades.
Hasta el corte del pasado domingo 31 de marzo, la Comisión Nacional Forestal (Conafor), informó sobre la propagación alarmante de incendios forestales en el país; un total de 120 en 19 diferentes estados.